Yo tampoco sé cómo llegué aquí...

viernes, 25 de agosto de 2017

Espacios

A mi abuelita Elvia...

A veces reconozco en mi algo tuyo que se acentúa cuando bebo café. 

Me traslado a esos momentos en los que te miraba sentada a la mesa, pintando tus uñas largas y te dabas tiempo para ser mi cómplice al dejarme darle un sorbo a tu café mientras mis papás estaban distraídos.

También fuiste maestra, de esas tan fuertes que enseñan a compartir, a abrazar, a ser solidario con acciones. Creo queeso no te aprendí bien. Te encuentro en canciones y lugares, recuerdos que me sirven para rellenar y zurcir ese hueco que dejaste aquí.

Encuentro

Al despertar, mi noctámbulo caminar me guió a la ventana. El cristal iluminado por la luna de la fría madrugada reflejaba mi cara, pero no me reconocí. Cambió color de mi cabello y hasta mi piel. Ya no hay huellas de ti. 

Soledad

Perdí la luz de tus ojos, dejé de mirarlos al amanecer. En vano mi mano recorre tu espacio en la cama y sólo encuentra el frío de tu ausencia en las sábanas. Odio cuando no estás.

jueves, 24 de febrero de 2011

¿Existes?

Perdí la luz de tus ojos, dejé de mirarlos al amacener. En vano mi mano recorre tu espacio en la cama y sólo encuentra el frío de tu ausencia en las sábanas. Te odio cuando no estás.

lunes, 20 de julio de 2009

Psicosis en el Lunario: veinte años de La Castañeda


La Castañeda celebró veinte años de vida dentro del lado oscuro del rock nacional la noche del 18 de julio en el Lunario del Auditorio Nacional, concierto lleno de mística, en el que interpretaron sus canciones más representativas y presentaron su nuevo sencillo titulado La Eterna Noche.


Para dar por iniciado el festejo, Almas Gemelas se dio paso en el escenario al filo de las 21 horas. Treinta minutos después, la banda de death metal Eternal Primates hizo lo propio, aunque no con un buen recibimiento del público, quienes a una sola voz gritaban “Casta, Casta”.


Pero no fue sino hasta las 22 horas cuando La Castañeda apareció en el recinto para dar inicio al festejo de sus veinte años de rock. Vestidos de negro pero ya no pelones, como hace veinte años, hicieron un recorrido por las canciones más representativas que han arrojado sus siete producciones discográficas.


Como ya es característico de la agrupación, presentó un espectáculo interdisciplinario: arte plástico, música y performance se conjugaron en escena. El Lunario vibró mientras los asistentes coreaban Lo Demonio, La Fiebre de Norma, Sueños, Cintia más allá, por mencionar algunas canciones que dieron apertura al show.


Salvador Moreno (voz), Oswaldo de León (guitarra), Omar de León (teclados). José Luis Escamilla (Bajo) y Felipe Maldonado (Batería), lograron los momentos más frenéticos de la noche con La Misteriosa, El Loco, Ciudad Sicótica, Gitano de Mente, Tumba Matriz, Cautivo de la Calle y Tloque Nahuaque.


Para finalizar, después de más de 90 minutos de mantener a sus seguradores coreando y bailando, La Castañeda terminó con un set acústico en el que interpretaron Cenit, Noches de tu Piel y Transfusión, con la que se despidieron del Lunario, no sin antes agradecer a sus seguidores la fidelidad y apoyo a la banda.


También hubo lugar para la presentación del nuevo sencillo La Eterna Noche, canción que fue bien recibida por el público, con lo que la banda puede augurar continuará su éxito dentro del rock hecho en México.