Yo tampoco sé cómo llegué aquí...
viernes, 25 de agosto de 2017
Encuentro
Al despertar, mi noctámbulo caminar me guió a la ventana. El cristal iluminado por la luna de la fría madrugada reflejaba mi cara, pero no me reconocí. Cambió color de mi cabello y hasta mi piel. Ya no hay huellas de ti.
Soledad
Perdí la luz de tus ojos, dejé de mirarlos al amanecer. En vano mi mano recorre tu espacio en la cama y sólo encuentra el frío de tu ausencia en las sábanas. Odio cuando no estás.
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